Mtro. Mario Andrade,
Rector de la Universidad Autónoma de Aguascalientes.
Presente.
Rostros
de la Trata, medio informativo en materia de Trata de Personas y temas
vinculados al mismo, como lo es la violencia de género, a través de este
escrito fijamos nuestra postura respecto a las lamentables declaraciones que
hiciera en días pasados al referirse al delito de violación sufrido por una
alumna de la institución educativa que usted dirige.
Al
leer las notas que reportan lo sucedido a la víctima y las lamentables
declaraciones que usted hiciera al respecto, resulta inevitable encontrar
graves paralelismos en el caso Steubenville Ohio[1], pues
resulta claro que su estudiante no sólo ha sido víctima del delito de
violación, sino también de una violencia simbólica encabezada por su afirmación,
lo que la colocado en una situación de revictimización.
En
ningún caso, bajo ninguna circunstancia, la víctima de violación es responsable
mucho menos culpable de la conducta irracional y delictiva de quien(es) la
viola(n), se trate o no de estudiantes de la Universidad Autónoma de
Aguascalientes o cualquier otra institución. Estas expresiones, que justifican
el delito al responsabilizar a la víctima, forman parte de una cultura de
violación enraizada en nuestra sociedad; expresiones que, al venir de quien
encabeza una institución educativa del nivel de la Universidad Autónoma de
Aguascalientes resultan por demás reprochables.
No basta
retractarse de las declaraciones, y tampoco es correcto decir que si los
culpables son alumnos o maestros el caso será atraído por la Universidad: un
delito debe ser investigado por quien está facultado para hacerlo por nuestra
Carta Magna, de otra manera, violentaríamos (aún más) nuestro Estado de
Derecho.
Por
último, le instamos a recordar que no se trata de educar a las mujeres para que
se cuiden de no ser violadas, sino de educar a los hombres para que no sean
violadores.
Atentamente,
El
Equipo de Rostros de la Trata